Acta otorrinolaringol. cir. cuello (En línea); 48 (2), 2020
Publication year: 2020
Introducción:
la rinosinusitis crónica (RSC) es una de las enfermedades más prevalentes
a nivel mundial. Los eosinófilos desempeñan un papel importante en la
generación del proceso inflamatorio nasosinusal crónico secundario a la generación
de una respuesta maladaptativa Th2 y cambios en la microbiota nasal. El objetivo
del estudio es determinar si la eosinofilia periférica puede usarse como factor predictor
de severidad tomográfica en pacientes que cursan con rinosinusitis crónica.
Métodos:
se realizó un estudio observacional de corte transversal con componente
analítico en pacientes con diagnóstico de RSC quienes dispusieran en su registro de
historia clínica un hemograma con recuento de eosinófilos. El tamaño de la muestra
fue de 74 individuos. Resultados:
la eosinofilia periférica se estableció como factor
de severidad tomográfica, ya que se encontró que por cada incremento de 100 eosinófilos
en sangre, aumentaría en un punto el puntaje total de la escala tomográfica
Lund-Mackay. Este patrón fue similar en pacientes con pólipos y asma, en los que se
encontró un incremento en los puntajes totales de 4 y 5 puntos, respectivamente, con
respecto a los pacientes que no presentan estas patologías. Conclusión:
la utilización
de la eosinofilia periférica como predictor de severidad podría ser de gran utilidad
para la comunidad médica. Este biomarcador puede resultar en un ahorro potencial
de costos al eliminar la necesidad de tratamientos médicos repetidos en pacientes
que de entrada tienen un riesgo incrementado de enfermedad nasosinusal severa.
Introduction:
chronic rhinosinusitis (CRS) is one of the most prevalent diseases
worldwide. Eosinophils play an important role in the generation of a chronic nasosinusal
inflammatory process secondary to the generation of a Th2 maladaptive
response and changes in the nasal microbiota. The objective of the study is to determine
if peripheral eosinophilia can be used as a predictor of tomographic severity
in patients with chronic rhinosinusitis. Methods:
an observational cross-sectional
study with an analytical component was performed in patients with a diagnosis of
CSR who had an eosinophil count in their clinical record. The sample size was 74
individuals. Results:
peripheral eosinophilia was established as a tomographic severity
factor, finding that for each increase of 100 eosinophils in blood, the total
score of the Lund-Mackay tomographic scale would increase by 1 point. This pattern
was equally concordant in patients with polyps and asthma, with increases in total
scores of 4 and 5 points respectively, with respect to patients who do not present
these pathologies. Conclusion:
the uses of peripheral eosinophilia as a predictor of
severity could be very useful for the medical community. This biomarker can result
in potential cost savings by eliminating the need for repeated medical treatments in
patients who initially have an increased risk of severe nasosinusal disease.