Rev. méd. Hosp. José Carrasco Arteaga; 11 (1), 2019
Publication year: 2019
INTRODUCCIÓN:
El síndrome de Parry Romberg o atrofia hemifacial progresiva es una patología caracterizada por causar atrofia facial unilateral con afectación de piel, tejido celular subcutáneo y músculo. Su prevalencia mundial es de 1/700 000, tiene predominio por el sexo femenino con una proporción mujer – hombre de 3:2. Clínicamente se manifiesta como una esclerodermia lineal en golpe de sable, y afecta con mayor frecuencia a hemicara izquierda. El tratamiento es de tipo quirúrgico e incluye técnicas como injertos, colgajos o prótesis.
CASO CLÍNICO:
A continuación se presenta una serie de casos que incluye a tres pacientes que consultaron por alteraciones de la anatomía y el desarrollo facial; quienes posterior a un examen físico minucioso y a la realización de exámenes de imagen, fueron diagnosticados de síndrome de Parry Romberg.
EVOLUCIÓN:
En todos los casos el tratamiento fue quirúrgico; optándose por la colocación de un injerto dermograso en la zona afectada, el mismo que fue obtenido de la cavidad abdominal. La evolución clínica y la adherencia del injerto fue satisfactoria y sin complicaciones.
CONCLUSIÓN:
Los resultados obtenidos de la colocación de injertos dermograsos para el tratamiento de la atrofia hemifacial progresiva fueron excelentes a corto, mediano y largo plazo.(au)
BACKGROUND:
Parry Romberg syndrome or progressive hemifacial atrophy is an entity characterized by unilateral facial atrophy with involvement of skin, subcutaneous tissue and muscle. Its worldwide prevalence is 1/700 000, with a female - male ratio of 3:2. Clinically it manifests as linear scleroderma and most frequently affects the left side of the face. The treatment is surgery and includes techniques such as grafts, flaps or prostheses.
CASE REPORT:
The following is a case series that includes three patients, who consulted for anatomic and developmental alterations of the face; who after a meticoluos physical examination and imaging tests were diagnosed with Parry Romberg syndrome.
EVOLUTION:
In all cases, the treatment was surgery; opting for the placement of a skin graft in the affected area, which was obtained from the abdominal cavity. The clinical evolution and adherence of the graft was satisfactory and without complications.
CONCLUSION:
The results obtained from the placement of skin graft as the treatment of progressive hemifacial atrophy were excellent in short, medium and long term.(au)