Infectio; 24 (2), 2020
Publication year: 2020
Objectives:
The Dominican Republic lacks reliable information on antimicrobial resistance (AMR), which would allow physicians to prescribe the best treatment for common infectious diseases. This study aimed to define the antimicrobial resistance profiles of the more common pathogens from pediatric services, where data is even more important due to the vulnerability of the population. Methods:
We collected data from patients admitted in the pediatric unit of three third level hospitals in the city of Santiago de los Caballeros, Dominican Republic, showing positive bacterial cultures, during a period of two years. Results:
Half of the Gram negative pathogens exhibited third generation cephalosporins (3GC) resistance, 17% were resistant to carbapenems. Serratia marcescens presented an exceptionally high proportion of resistance to 3GC (95.9%). Staphylococcus aureus showed elevated resistance to methicillin (58.4%) and even to clindamycin (35.8%). Conclusion:
There are elevated levels of antimicrobial resistance among the Enterobacteriaceae family and the Staphylococcus genus isolated from the pediatric population. Necessary measures should be taken to tackle AMR in the country.
Objetivos:
La República Dominicana carece de información confiable sobre las resistencias antimicrobianas en el país, lo que permitiría al personal médico prescribir los mejores tratamientos para infecciones comunes. El objetivo de este estudio es definir los perfiles de resistencia antimicrobiana de los patógenos más comunes en servicios pediátricos, donde esta información es esencial, debido a la vulnerabilidad de la población. Métodos:
Se tomaron los datos de reportes microbiológicos con cultivo bacteriano positivo procedentes de pacientes admitidos en la unidad pediátrica de tres hospitales de tercer nivel en la ciudad de Santiago de los Caballeros, República Dominicana, durante un periodo de dos años. Resultados:
La mitad de los patógenos Gram negativos mostraron resistencia a cefalosporinas de tercera generación (3GC), 17% eran resistentes a carbapenémicos. Serratia marcescens presentó una resistencia excepcionalmente elevada a 3GC (95.9%). Staphylococcus aureus mostró alta resistencia a meticilina (58.4%) e incluso a clindamicina (35.8%). Conclusión:
Existen elevados niveles de resistencia antimicrobiana entre las enterobacterias y los estafilococos en la población pediátrica dominicana. Es necesario tomar medidas para abordar este problema en el país.