Fluidoterapia y electrolitos parenterales en pediatría
Fluid therapy and electrolytes in pediatrics

Metro cienc; 28 (4), 2020
Publication year: 2020

RESUMEN La administración de líquidos y electrolitos parenterales es una terapia fundamental de soporte en niños agudamente enfermos si la vía oral no permite la administración de la cantidad o composición requeridas de fluidos, por ejemplo en enfermedades de tipo gastrointestinal, respiratorio, neurológico, o en el período transoperatorio. Al momento de planificar la administración de líquidos y electrolitos parenterales en niños a partir del mes de edad, se debe considerar componentes relacionados con la cantidad de líquidos a infundir considerando los requerimientos secundarios a pérdidas hídricas habituales o requerimientos para reacciones metabólicas, evaluar el grado de deshidratación para la administración de líquidos que complementen el déficit, corregir las pérdidas que se han producido secundarios a una noxa externa (enfermedad, procedimiento quirúrgico, trauma, etc.) y finalmente aportar la cantidad adecuada de fluido que permita re-establecer la perfusión tisular. Es necesario conocer los cambios instaurados basados en la evidencia actual con la finalidad de incorporar a el manejo frecuente de los pacientes considerando también la toxicidad ya sean cualitativos o cuantitativos de esta terapéutica tan necesaria en el manejo del paciente pediátrico
ABSTRACT The administration of parenteral fluids and electrolytes is a fundamental support therapy in acutely ill children if the oral route does not allow the ad-ministration of the required amount or composition of fluids, for example in gastrointestinal, respiratory, neurological, or transoperative diseas-es. When planning the administration of parenteral fluids and electrolytes in children from one month of age onwards, components related to the amount of fluids to be infused should be considered, taking into account the requirements secondary to habitual water loss or requirements for meta-bolic reactions, evaluating the degree of dehydration for the administration of fluids to supplement the deficit, correcting the losses that have oc-curred secondary to an external noxa (illness, surgical procedure, trauma, etc.) and finally providing the adequate amount of fluid to allow re-es-tablishment of tissue perfusion. It is necessary to know the changes established based on current evidence in order to incorporate to the frequent management of patients, also considering the toxicity, either qualitative or quantitative, of this therapy, so necessary in the management of the pediatric patient.

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