Pesquisa activa en la Atención Primaria de Salud para enfrentar la COVID-19
Active screening in Primary Health Care to tackle COVID-19

Rev. cuba. med; 60 (1), 2021
Publication year: 2021

La pesquisa activa en salud ha sido definida por Fernández Sacasas JA y Díaz Novás J, como el conjunto de acciones diagnósticas que tienden a identificar el estado de salud individual en grupos de población, con la finalidad de establecer los factores de riesgo existentes y descubrir tempranamente la morbilidad oculta, con el objetivo de ser incluidos en programas y de este modo, garantizar su seguimiento y atención continuada.1 Dicho concepto se patentiza en el Sistema Nacional de Salud Cubano, al hacer que la Atención Primaria de Salud sea la base angular del sistema, dándole accesibilidad a los servicios de salud a la totalidad de la población del país. Esto permite dar atención médica continua con un manejo integrador de sus problemas y sus determinantes sociales de salud. Es, por tanto, que en su concepción, desde que en el año 1984 se funda el Programa del Médico y la Enfermera de la Familia, la pesquisa activa que realizan los especialistas de la Medicina General Integral se convirtió en el instrumento y herramienta principal de trabajo. La mayor eficacia, efectividad, pertinencia y validez en correlación con el uso del método clínico epidemiológico, le permite identificar de manera oportuna síntomas de enfermedades, problemas individuales y colectivos para accionar con rapidez. La meta final de un programa de pesquizaje es la disminución de la mortalidad específica de la enfermedad sujeta a pesquisa, gracias a la identificación del mayor número de individuos a los que se les pueda ofrecer la posibilidad de un tratamiento oportuno y efectivo, para mejorar su calidad de vida durante el estadio de la enfermedad. La decisión e implementación de adoptar un programa de pesquizaje por las autoridades sanitarias de un país es un proceso complejo en el que interactúan múltiples factores.2 En la prevención de la COVID-19, es clave la pesquisa activa a la población. La organización y manejo de este proceso requiere una comprensión clara de este si se espera por parte de las autoridades sanitarias de un área de salud contener la pandemia de COVID-19. Se debe responder a las demandas de la población, por lo que esta actividad no solo deberá estar encaminada a la detección precoz de casos sospechosos, sino también debe constituir una herramienta de comunicación que permita esclarecer las dudas de la población e incrementar la percepción del riesgo sobre la enfermedad y contribuya a incrementar la autorresponsabilidad y disciplina en el cumplimiento de medidas adoptadas por el Sistema de Salud y Gobierno del país en la contención y control de la pandemia. El proceso de percepción selectiva hace que a las personas les resulte más memorable determinada información cuando la brinda un médico o personal de la salud de manera directa, ello eleva los niveles de confiabilidad y credibilidad. Más aun cuando en situaciones como en la pandemia actual, a través de la pesquisa activa, se logra en un breve tiempo llegar a un número importante de personas que pueden convertirse en emisores de elementos promocionales dentro del propio núcleo familiar y la comunidad. La pesquisa activa es un método de alta eficacia para la determinación de los problemas de salud de la población, tal y como se ha afirmado por las máximas autoridades del Ministerio de Salud Pública. Es la tecnología sanitaria más importante que se está empleando en el país, además de constituir un aporte de Cuba a los protocolos empleados para el enfrentamiento de la enfermedad, donde no solo se involucra a los trabajadores de la salud, sino que, de manera formativa, también tienen un protagonismo importante los estudiantes de la carrera de ciencias médicas. De manera tal que se potencie la percepción de riesgo en la población, así como la formación, sensibilización y preparación de los estudiantes y especialistas que en ella intervienen. El viernes 6 de marzo de 2020, el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, encabezaron en la provincia de Villa Clara la primera de las tres reuniones territoriales que se realizaron en la Isla para dar a conocer la actualización del Plan para la Prevención y Control del nuevo coronavirus y aclarar cualquier inquietud que se pudiera suscitar. El Jefe de Estado insistió en que las acciones que se han comenzado a desarrollar no son para alarmar ni crear pánico, sino para hacer tanto como esté a nuestro alcance en materia organizativa y de concepción de estrategias para estar debida y oportunamente preparados, tanto a nivel de dirección como de la población.3 Desde ese mismo momento, se organizó en la Atención Primaria de Salud la vigilancia en salud de viajeros internacionales que devino una vez con la aparición de casos positivos relacionados con viajeros enfermos y la aparición final de casos autóctonos en la actual pesquisa activa a la población. La consolidación en los policlínicos durante la pandemia de la COVID-19 le brinda al personal de salud herramientas de comunicación asertiva para reaccionar ante situaciones desfavorables dentro de las comunidades que potencien la propagación de la enfermedad; así como de manera activa también se educa para establecer hábitos higiénicos y potenciar cambios de estilo de vida en las comunidades. A su vez, la pesquisa activa deberá estar organizada como un proceso dentro de las áreas de salud de atención continua enfocado a la población general susceptible pero con énfasis en los grupos de poblaciones de riesgo o vulnerables. Esto ofrece una garantía de seguimiento permanente y diario para la identificación temprana de síntomas y signos sugestivos de la enfermedad y la adopción de las medidas oportunas que permitan evitar la propagación de la misma. Para lograrlo, deberán estratificarse las comunidades manzanas y consultorios estableciendo indicaciones, organización y prioridades de esta actividad que de manera eficiente se haga efectiva. El día 30 de marzo de 2020, el Ministro de Salud Publica Dr.

José Ángel Portal Miranda expresaba en el programa cubano Mesa Redonda:

Ayer se atendió a 31 361 personas. Dentro de esa pesquisa, logramos identificar 221 sospechosos de la enfermedad. Esta ha sido una de las medidas de refuerzo más importantes, porque no esperamos que aparezca el caso, sino que lo buscamos. No es algo que logran hacer todos los países.4 Y es que Cuba, dentro del desarrollo de su medicina comunitaria, ha alcanzado logros ampliamente reconocidos a nivel mundial por el desarrollo de las acciones coordinada entre los diferentes factores de la comunidad para potenciar la percepción del riesgo en las personas, modificar estilos de vida e identificar los problemas de salud que afectan de manera individual y colectiva a las comunidades. Trabajar desde cada área de salud, especialmente a través del médico y enfermera de la familia, de conjunto con trabajadores de las instituciones de salud, representantes de las organizaciones de masas, para hacer llegar una orientación más focalizada e individualizada a personas y grupos poblacionales, tanto de riesgo o vulnerables, como a aquellos que puedan ejercer una mayor influencia en sus vecinos y familiares constituye un aporte esencial en el desarrollo de la actividad de pesquisa diaria. Todo lo cual presupone la participación activa de los Consejos Populares, en función de aprovechar toda la información que manejan respecto a la caracterización de cada demarcación. De especial interés resulta la información que estos grupos manejan respecto a los grupos etarios presentes en la comunidad. Además, esta estructura brinda facilidades para articular e incorporar a otros entes socioeconómicos enclavados en la comunidad como soporte logístico a cada una de las acciones que se realicen. A siete meses de la aparición de los primeros casos en Cuba, el Ministerio de Salud ha ido perfeccionando la actividad de pesquisa a nivel de la Atención Primaria de salud, enfocados en la actualidad epidemiológica de los territorios a partir del Plan para la Prevención y Control del Nuevo Coronavirus que en su Objetivo específico 3 de Organizar el Sistema Nacional de Salud para garantizar la atención médica oportuna y de calidad a la población que resulte afectada establece: Organizar la vigilancia epidemiológica, la pesquisa activa y la atención médica a nivel de las áreas de salud para garantizar el diagnóstico oportuno, así como la remisión a hospitales y centros de aislamiento de los casos sospechosos. Para lo cual, a nivel de los consultorios del médico y la enfermera de la familia, se organiza y realiza la pesquisa activa diaria a la población priorizando las áreas de mayor concentración de personas (ciudadelas, edificios multifamiliares, comunidades de tránsito y todas aquellas localidades que por sus condiciones socio demográficas y epidemiológicas puedan constituir zonas de riesgo) así como a los grupos vulnerables de la población (adultos mayores solos, embarazadas, puérperas, lactantes, pacientes con enfermedades crónicas y pacientes con discapacidades). Cuba tiene como elemento innovador frente a la COVID-19 la prevención mediante el aislamiento social y el empleo de la pesquisa activa, dos tecnologías sanitarias que pueden ayudar a adelantarnos y marcar la diferencia en el curso de esta enfermedad.5 De ahí que la pesquisa activa intencionada y bien estratificada es la manera más efectiva y oportuna con la que se cuenta en la Atención Primaria de Salud para identificar los pacientes sospechosos y lograr su oportuno aislamiento de la población susceptible. El empleo sistemático, organizado y controlado de la pesquisa permitirá contener la expansión actual de casos y constituirá de manera eficiente a que el rebrote que vive el país sea yugulado de manera eficiente y eficaz y en eso la Atención Primaria de Salud tiene una función decisiva y esencia(AU)

More related