La burla emerge como una acción simbólica en la relación burlón-burlado. Usualmente se expresa en la modalidad hostil o en la modalidad amigable. El propósito de este artículo es reflexionar acerca de la noción de desarrollo que subyace a los estudios de la burla. Para cumplir con este objetivo se adoptaron los postulados de Jaan Valsiner acerca de los axiomas que conducen la investigación y las matrices de pensamiento psicológico que dan sentido a la re-organización de las teorías del desarrollo en tres modelos: Diferenciación, Equilibración y Enseñanza-aprendizaje. La revisión muestra una distribución de los estudios de la burla en el axioma no evolutivo y en el axioma evolutivo. Los estudios en el axioma evolutivo se caracterizan por la identificación de capacidades y habilidades cognitivas y sociales que se complejizan con la edad. En esta modalidad de trabajos se subordina la expresión de la burla respecto a otras expresiones humorísticas como el sarcasmo, la sátira y la ironía. Los referentes teórico-metodológicos de los estudios en el axioma evolutivo se aproximan al Modelo por Equilibración. Las conclusiones señalan la pertinencia de sostener la coherencia de las matrices de pensamiento psicológico en las investigaciones que indagan problemáticas del desarrollo.