Desarrollo evolutivo humano y longevidad. Un análisis bio-psicosocial
Human evolutionary development and longevity. A bio-psychosocial analysis
Rev. iberoam. psicol. (En línea); 13 (1), 2020
Publication year: 2020
En este trabajo se hace una revisión bibliográfica sobre el desarrollo evolutivo humano y longevidad, desde un enfoque biopsicosocial (Engel, 1977; Gliedt et al., 2017; Lehman et al., 2017). Tras aplicar el método de análisis PRISMA, se obtuvieron diversos resultados relacionados con un desarrollo evolutivo más longevo; así, en el área biológica, 3 factores: los SNPs, los telómeros y la química del estrés; en el área psicológica, 5 factores: la metacognición, la resiliencia, la espiritualidad, las relaciones personales y la depresión; y en el área social, 8 factores: la pseudo-heredabilidad, las relaciones conyugales, la maternidad, el nivel educativo, estilos de vida, dieta y restricción calórica, actividad física y mental y tecnología sanitaria. Ante los datos obtenidos en las tres áreas, de este enfoque biopsicosocial, y el repetido solapamiento entre factores del área psicológica y del área social, se plantea que pudieran considerarse estas dos como una conjunta, proponiéndose un enfoque explicativo con dos áreas: bio-psicosocial que, por factores encontrados en este trabajo, quedarían un 18,7% de biológica y un 81,3% psicosocial. Actualmente, hay suficiente información sobre desarrollo evolutivo humano y longevidad, pero una ausencia de investigaciones que estudien esos factores desde una perspectiva integrada. Mucha de esa información privilegiada se podría aplicar ya, psicológica y socialmente, a la población en general, para una mejora de su salud, en cualquier fase del desarrollo evolutivo humano.
In this work, a literature review on human evolutionary development and longevity is made from a biopsychosocial approach (Engel, 1977; Gliedt et al., 2017; Lehman et al, 2017). After applying the PRISMA analysis method, several results related to a more long-lived evolutionary development were obtained; thus, in the biological area, 3 factors: SNPs, telomeres and stress chemistry; in the psychological area, 5 factors: metacognition, resilience, spirituality, personal relationships and depression; and in the social area, 8 factors: pseudo-heritability, conjugal relations, motherhood, educational level, lifestyles, diet and caloric restriction, physical and mental activity and health technology. Given the data obtained in the three areas, of this biopsychosocial approach, and the repeated overlap between factors of the psychological area and the social area, it is proposed that both could be considered as a joint, proposing an explanatory approach with two areas: bio-psychosocial that, for factors found in this work, would be 18.7% biological and 81.3% psychosocial. Currently, there is enough information on human evolutionary development and longevity, but an absence of research that studies these factors from an integrated perspective. Much of this privileged information could be applied already, psychologically and socially, to the population in general, for an improvement of their health, at any stage of human evolutionary development.