Rev. colomb. psiquiatr; 50 (1), 2021
Publication year: 2021
RESUMEN Introducción:
Los problemas y los trastornos mentales son prevalentes en la población adolescente. Se calcula que alrededor de un 10% de los adolescentes sufren trastornos mentales que requieren atención y, en general, no se reconocen como tales. El objetivo es determinar potenciales factores asociados con que se reconozcan o no los trastornos y problemas mentales en la población colombiana. Métodos:
De la Encuesta Nacional de Salud Mental (ENSM) del 2015 realizada en Colombia, se recogió a los adolescentes de 12-17 arios que respondieron a si algún profesional los había diagnosticado un problema o trastorno de salud mental y se los comparó con los que puntuaron positivo en trastornos mentales medidos por el CIDI 3.0 o en problemas mentales detectados por el SRQ-20. Resultados:
Se obtuvo una muestra de 1.754 adolescentes, de los que el 7,3% (n = 129) tenían trastornos y el 22,6% (n = 396) tenían problemas. Del total con trastornos y problemas, reconocen que los tienen el 13,9% (n = 18) de las personas con trastornos y el 8,3% (n = 33) de aquellos con problemas. Se realizaron análisis bivariables con posibles variables relacionadas y, con los resultados, se construyó un modelo multivariable de regresión que evidenció factores asociados con el reconocimiento de trastornos o problemas, como disfunción familiar (OR = 2,5; IC del 95%, 1,3-4,5) y acudir a familiar en caso de problemas económicos (OR = 2,7; IC del 95%, 1,0-7,2). Conclusiones:
El reconocimiento es de gran relevancia para que los adolescentes inicien el acceso a la asistencia. Los resultados proveen variables asociadas que permiten planear intervenciones que promuevan la detección de trastornos y problemas en esta población.
ABSTRACT Introduction:
Mental problems and disorders are prevalent in the adolescent population. It is estimated that around 10% of adolescents have mental disorders that require attention and are generally not recognised as such. The aim was to determine potential factors associated with whether or not mental disorders and problems are recognised in the Colombian population. Methods:
Adolescents aged 12 to 17 who said they had been diagnosed with a mental health problem or disorder by a healthcare professional were identified from the National Mental Health Survey conducted in Colombia in 2015. This group was compared with those who scored positive for mental disorders measured by CIDI 3.0 or mental problems detected by SRQ-20. Results:
A sample of 1,754 adolescents was obtained, of whom 7.3% (n = 129) had disorders and 22.6% (n = 396) had problems. Of the total with disorders and problems, 13.9% (n = 18) of people with disorders and 8.3% (n = 33) with problems knew they had them. Bivariate analyses were performed with the possible related variables, and with the results we constructed a multivariate regression model that identified factors associated with the recognition of disorders or problems, such as family dysfunction (OR = 2.5; 95% CI, 1.3-4.5) or counting on family when having financial problems (OR = 2.7; 95% CI, 1.0-7.2). Conclusions:
Recognition is of great importance for initiating access to care by adolescents. The results provide associated variables which can aid planning of interventions to improve the detection of disorders and problems in this population.