ARS med. (Santiago, En línea); 45 (3), 2020
Publication year: 2020
Introducción:
la pandemia por SARS-CoV-2 ha causado cambios en la formación médica a nivel mundial. Se han suspendido todas las actividades presenciales buscando reducir el contagio y, además, dada la creciente demanda hospitalaria, ha generado la necesidad de buscar nuevas formas de mantener la docencia y a la vez, balancear ésta con las necesidades hospitalarias. Desarrollo:
revisamos la experiencia de estudiantes de medicina en otros países, tanto las similitudes como diferencias respecto a lo vivido en Chile, bajo nuestra formación. El interno de medicina, a diferencia del estudiante o del médico, se encuentra en un rol intermedio como práctica profesional y consideramos que tiene un rol positivo en el apoyo a los servicios de salud durante la crisis actual. Presentamos nuestra experiencia como internos de medicina voluntarios en los distintos campos clínicos que se encuentran bajo el alero de nuestra universidad y como hemos experimentado la creciente sobrecarga hospitalaria, incertidumbre, soledad y experiencia con la muerte en nuestra práctica. Conclusión:
la experiencia como internos durante esta pandemia y como voluntarios en los distintos servicios de nuestros campos clínicos ha alterado profundamente nuestra formación médica. Nos ha permitido interiorizarnos no solo en aspectos técnicos, sino también en el área más humana de la medicina, en aprender sobre trabajo en equipo, la incertidumbre y el fin de la vida. Creemos que todo esto nos ha preparado y nos ha dado una experiencia invaluable para nuestra futura práctica médica.
Introduction:
The SARS-Cov-2 pandemic has changed medical training worldwide. All face-to-face activities have been suspended seeking to reduce contagion, and also, given the growing hospital demand, it has generated the need to find new ways to keep tea-ching and, at the same time, balance it with hospital needs. Body:
We review the experience of medical students in other countries, both similarities and differences from what has been experienced in Chile under our training. Medical interns, unlike other students or physicians, are in an intermediate role in their professional practice, and we consider that we have a positive role in supporting health services during the current crisis. We present our experience as volunteer medical interns in the different clinical facilities that are as-sociated with our university and how we have experienced the increasing hospital overload, uncertainty, loneliness, and experience with death in our practice. Conclusion:
The experience as interns during this pandemic and as volunteers in the different departments from our clinical facilities has profoundly affected our medical training. It has allowed us to understand not only technical aspects but also the most humanitarian areas of medicine, by learning about teamwork, living with uncertainty, and the end of life. We believe that all of this has prepared us and given us invaluable experience for our future medical practice.