Rev. Asoc. Argent. Ortop. Traumatol; 69 (4), 2004
Publication year: 2004
Introducción:
Se evaluaron 21 enfermos que presentaron en su mayoría colapsos vertebrales, a los cuales se les realizó vertebroplastia, es decir inyección de PMMC (polimetilmetacrilato) intravertebral, en forma transpedicular percutánea. Se tuvieron en cuenta las indicaciones, como tumores primitivos y secundarios (clasificación TOMITA grado I), colapsos por osteoporosis, Kümmel, hemangiomas sintomáticos y lesiones acetabulares. También se observaron las contraindicaciones absolutas, como alteraciones de la coagulación, infecciones en la zona de abordaje, lesiones tumorales grados TOMITA II y III, y las contraindicaciones relativas, como rotura del muro posterior y lesiones pediculares (pediculoplastia).Materiales y métodos:
Entre 2002 y 2004 se efectuaron 28 vertebroplastias en 21 enfermos con un seguimiento promedio de 14 meses (rango 8 a 27 meses), 17 de los cuales eran mujeres (80,95 por ciento) y 4 varones (19,04 por ciento), con una edad promedio de 62 años (rango de 35 a 83 años). Los pacientes que necesitaron alivio de los síntomas fueron 3 con neoplasias secundarias, 3 con hemangiomas, 14 con fracturas por osteoporosis y uno con necrosis por artritis reumatoide. Cada vértebra llevó 30 minutos aproximadamente y se utilizó la vía transpedicular en todos los casos. La biopsia previa a la vertebroplastia se efectuó en todos los pacientes en quienes había dudas diagnósticas. No se realizaron más de tres segmentos vertebrales por procedimiento y se efectuó venografía con constraste yodado no iónico en todos los casos, tanto unipediculares como bipediculares y lavado con solución fisiológica (10 a 20 cm3) para evitar la confusión al inyectar el cemento, lo que se realiza bajo control radioscópico permanente. Resultados:
Hubo un 14,28 por ciento de complicaciones sin significado clínico. Luego se compararon los motivos de consulta (dolores incapacitantes, mala calidad de vida y falta de respuesta a los analgésicos) con los resultados obtenidos, 17 pacientes con desaparición completa del dolor, 3 con dolor leve que responden con analgésicos orales discontinuos y uno en quien mejoró la raquialgia pero cuya cruralgia radicular persistió por la presencia de un pedículo osteolítico. En 4 casos se observó que la cantidad de cemento inyectado no condicionó el resultado.Conclusiones:
Las patologías pasibles de ser tratadas con vertebroplastia deben abarcarse en forma multidisciplinaria; la VTP es una ayuda importante para el alivio de los síntomas