Virus del papiloma humano (VPH) y cáncer
Human papillomavirus (HPV) and cancer
Med. lab; 25 (2), 2021
Publication year: 2021
Cada año, más de medio millón de mujeres en el mundo son diagnosticadas
con cáncer cervical, usualmente asociado a la infección por virus del papiloma
humano (VPH) de alto riesgo. Aunque la mayoría de las infecciones por
VPH se resuelven dentro de un término menor de 2 años, algunos tipos virales,
en particular el VPH16, pueden persistir por décadas y originar diferentes tipos
de cáncer, siendo el cervical el más común. La historia natural de la infección por
VPH de alto riesgo y el periodo prolongado en que ocurre su progresión, permite
la prevención de la enfermedad. La infección por VPH de alto riesgo que evoluciona
a cáncer incluye varios procesos como la integración del genoma viral, la división
celular incontrolada, y la participación de cambios celulares y epigenéticos.
La prueba de citología convencional que se viene practicando para la tamización
hace más de 50 años continúa teniendo vigencia, especialmente en países de ingresos
bajos y medios, pero está siendo reemplazada por otros métodos como las
pruebas moleculares que detectan directamente la presencia del virus, con mayor
efectividad como prueba de tamización. En 2014, el Ministerio de Salud y Protección
Social de Colombia desarrolló una guía de práctica clínica para la detección
y manejo de lesiones premalignas de cuello uterino, en la cual se recomienda la
prueba de ADN-VPH para la tamización inicial en las mujeres mayores de 30 años.
Hasta el momento se han encontrado resultados positivos con la implementación
de la prueba, no obstante, se requieren estudios adicionales que confirmen estos
hallazgos, dada su importancia en el control de la morbilidad y mortalidad asociadas
a la infección
Each year, more than half a million women in the world are diagnosed with
cervical cancer, usually associated with high-risk human papillomavirus (HPV) infection.
Although most HPV infections resolve within 2 years, some viral types, particularly
HPV16, can persist for decades and cause different types of cancer, being the cervical
type the most common. The natural history of high-risk HPV infection and the prolonged
period in which its progression occurs, allows for the prevention of the disease.
High-risk HPV infection that progresses to cancer includes several processes such as
viral genome integration, uncontrolled cell division, and the participation of cellular
and epigenetic changes. The conventional Pap smear test that has been practiced as a
screening method for more than 50 years continues to be used, especially in low- and
middle-income countries, but it is being replaced by other methods such as molecular
tests that directly detect the presence of the virus, with greater effectiveness as a
screening test. In 2014, the Ministry of Health and Social Protection of Colombia developed
a clinical practice guide for the detection and management of premalignant
cervical lesions, in which the DNA-HPV test is recommended for initial screening in
women over 30 years. So far, positive results have been found with the implementation
of the test, however, additional studies are required to confirm these findings given
its importance in controlling the morbidity and mortality associated with the infection