Complicaciones infecciosas en pacientes con leucemia mieloide aguda
Infectious complications in acute myeloid leukemia patients
Actual. SIDA. infectol; 26 (97 Suplemento 1), 2018
Publication year: 2018
La leucemia aguda ha sido reconocida como una enfermedad compleja y rápidamente fatal desde su primera descripción hace 150 años. Librada a su historia natural, la leucemia mieloide aguda lleva a la muerte en pocos meses. Las infecciones son la principal causa de muerte, siendo la bacteriemia y la neumonía las más frecuentes.Los avances ocurridos en los últimos 50 años, como el advenimiento de quimioterapias efectivas, la mejor comprensión de la patogénesis de las complicaciones infecciosas en el paciente neutropénico, la disponibilidad de agentes anti infecciosos de amplio espectro y la mejoría en los cuidados de soporte contribuyeron a mejorar esta situación. En relación a otras enfermedades oncohematológicas, la leucemia mieloide aguda registra la mayor incidencia de eventos febriles, siendo el período de mayor riesgo el de la inducción a la remisión.La fiebre de origen desconocido, la multirresistencia bacteriana y las infecciones fúngicas invasivas constituyen un desafío para el equipo de trabajo.El uso de profilaxis antibacteriana y antifúngica no reemplaza a las medidas de prevención de carácter institucional
Acute leukemias have been recognized as complex and radiply fatal diseases since its first description 150 years ago. Delivered to its natural history, acute myeloid leukemia leads to death in a few months. Infections are the main cause of death, being bacteremia and pneumonia the most frequent. Advances in the last 50 years, such as the advent of effective chemotherapy, a best understanding of the pathogenesis of infectious complications in the neutropenic patient, the availability of broad-spectrum anti-infective agents and better supportive care helped improve this situation. Among other oncological diseases, acute myeloid leukemia has the highest incidence of febrile events, being induction to remission the period of greatest risk. Fever of unknown origin, bacterial multidrug resistance and invasive fungal infections are a challenge for the medical team. The use of antibacterial and antifungal prophylaxis does not replace institutional preventive measures