The School and Educational Psychology has been conquering new spaces for professional performance and research field, among them, we highlight Higher Education. Therefore, this study aimed to get the demands presented by coordinators of undergraduate courses and analyze them in the light of School Psychology in the critical perspective and to point out possibilities for the performance of the school psychologist with them. The qualitative research was carried out based on the content analysis of the answers obtained from the questionnaires sent by e-mail to the coordinators of the 77 undergraduate courses offered by a public Higher Education institution in Minas Gerais. We have 28 answered questionnaires. The demands presented refer to students' academic and emotional issues; the overload of teaching work; interpersonal relationships and continuing education; the bureaucracies faced by coordinators; and the lack of prior preparation and support for the practice of the function and conceptions about the work of the school psychologist. We conclude that the coordinator, when listening to and understanding demands from students, teachers, and technicians, seeks to respond to them with an auspicious partnership with the school psychologist, together with other segments and instances of the institution.(AU)

La Psicología Escolar y Educacional sigue conquistando nuevos espacios para la actuación y campo de investigación, entre ellos destaca la educación superior. Por lo tanto, este estudio tuvo como objetivo conocer las demandas presentadas por los coordinadores de cursos de graduación, analizarlas desde la perspectiva crítica de la Psicología Escolar y señalar posibilidades de actuación del psicólogo escolar. La investigación cualitativa realizó el análisis de contenido de las respuestas obtenidas de los cuestionarios enviados por correo electrónico a los coordinadores de los 77 cursos ofrecidos por una institución pública de educación superior en Minas Gerais (Brasil). Se respondieron 28 cuestionarios. Las demandas presentadas se refieren a cuestiones académicas y emocionales de los estudiantes; a la sobrecarga del trabajo docente; a las relaciones interpersonales y educación continua; a las burocracias que enfrentan los coordinadores; además de la falta de preparación previa y apoyo para el ejercicio de la función y concepciones sobre el trabajo del psicólogo escolar. Se concluye que el coordinador escucha y considera las demandas de los estudiantes, profesores y técnicos, y trata de responderlas por medio de una asociación favorable con el psicólogo escolar, junto con otros segmentos e instancias de la institución.(AU)