Rev. cuba. med. trop; 74 (3), 2022
Publication year: 2022
Introducción:
La infección por Histoplasma capsulatum ocurre con frecuencia en pacientes con inmunosupresión por VIH o en trasplantados que reciben tratamiento inmunosupresor. La infección primaria se adquiere por vía inhalatoria con afectación pulmonar y posteriormente puede diseminarse a otros órganos como hígado, intestinos, corazón, riñones, piel o tejido óseo. Es muy raro que ocurra en pacientes con trasplante renal, aunque sí es común en el trasplante pulmonar. Objetivo:
Presentar el caso de un paciente con antecedente de trasplante renal 9 años antes que ingresó por presentar lesiones cutáneas no típicas de histoplasmosis, quien desarrolló 2 semanas después histoplasmosis diseminada, sin compromiso pulmonar. Caso clínico:
Paciente masculino de 65 años de edad postrasplante renal, que desarrolló manifestación cutánea caracterizada por pápulas y placas eritematodescamativas con superficies costrosas y atróficas, acompañado de fiebre persistente y adenopatías. No presentó signos o síntomas pulmonares como manifestación de infección primaria. El diagnóstico definitivo se estableció mediante histopatología de piel y ganglios cervicales, además del crecimiento de H. capsulatum en hemocultivos específicos para hongos. Recibió tratamiento con anfotericina B liposomal y posteriormente con itraconazol de forma ambulatoria con evolución favorable. Conclusión:
El caso descrito es importante, ya que no se asemeja a la presentación típica de esta entidad, es decir, con afectación pulmonar primaria y posteriormente cutánea. Se espera haber enriquecido el conocimiento de esta enfermedad en pacientes trasplantados.
Introduction:
Histoplasma capsulatum infection frequently occurs in patients with HIV immunosuppression or in transplant recipients receiving immunosuppressive therapy. Primary infection is acquired by inhalation with pulmonary involvement, and may subsequently spread to other organs such as liver, intestines, heart, kidneys, skin or bone tissue. It is very rare in renal transplant patients, although it is common in lung transplantation. Objective:
To present the case of a patient with a history of renal transplantation nine years earlier, who was admitted for presenting skin lesions not typical of histoplasmosis, developing disseminated histoplasmosis two weeks later, without pulmonary involvement. Clinical Case:
Post-renal transplant male patient, aged 65, who developed cutaneous manifestations characterized by erythematous and scaly papules and plaques with crusty and atrophic surfaces, accompanied by persistent fever and lymphadenopathy. There were no pulmonary signs or symptoms of a primary infection. The definitive diagnosis was made by histopathology of skin and cervical nodes, in addition to the growth of H. capsulatum in specific blood cultures for fungi. The patient was treated with liposomal amphotericin B and later with itraconazole on an outpatient basis with favorable evolution. Conclusion:
The case described is important since it does not resemble the typical presentation of this entity, that is, with primary pulmonary and subsequently cutaneous involvement. It is expected to have enriched the knowledge of this disease in transplanted patients.