Rev. cuba. oftalmol; 31 (1), 2018
Publication year: 2018
Objetivo:
identificar la aparición de signos tempranos para el desarrollo de agujero macular idiopático en el ojo contralateral, mediante tomografía de coherencia óptica. Métodos:
se realizó un estudio longitudinal, prospectivo-descriptivo de serie de casos. Se estudiaron 208 ojos de 104 pacientes con diagnóstico de agujero macular idiopático atendidos en la consulta externa del Servicio de Retina del Instituto Cubano de Oftalmología "Ramón Pando Ferrer", entre diciembre del año 2008 y diciembre de 2011. Los pacientes fueron estudiados posteriormente por un periodo de cinco años. Se evaluaron las variables demográficas, la agudeza visual mejor corregida, los estadios de agujero macular por tomografía de coherencia óptica y se determinó la estabilidad, la progresión o la regresión de los hallazgos al año y a los cinco años en el ojo contralateral. En el análisis estadístico se empleó el porcentaje y las comparaciones de frecuencias, para lo cual se utilizó el estadígrafo Chi cuadrado con un nivel de significación del 95 por ciento. Resultados:
la edad promedio fue de 65,8 y predominó el sexo femenino. El 43,3 por ciento del ojo contralateral tenía alteraciones en la interfase vitreomacular al inicio del estudio. En la evolución al año y a los cinco años se observaron diferencias significativas (p= 0,000) en la distribución de casos en los diferentes estadios. Al año se mostró estabilidad en el 78,3 por ciento comparado con el 54,6 por ciento a los cinco años. La progresión a estadios más avanzados fue escasa y similar en los dos periodos de estudio (8,2 y 7,2 por ciento respectivamente). Hubo regresión de un 13,4 por ciento al año y 38,1 por ciento a los cinco años. El desprendimiento posterior del vítreo completo lo presentaron más del 60 por ciento de los ojos al final del estudio. Desarrollaron agujero macular idiopático de espesor completo el 4,8 por ciento de los ojos contralaterales. Existió disminución de la visión en aquellos pacientes con progresión a estadios más avanzados (p= 0,001). Conclusiones:
la tomografía de coherencia óptica resulta un método diagnóstico efectivo para la evaluación de los cambios anatómicos en los pacientes con agujero macular idiopático. Es necesario el seguimiento periódico para lograr una conducta quirúrgica temprana y una recuperación visual óptima, ya que se trata del segundo ojo afectado(AU)
Objective:
identify the appearance of early signs of the development of idiopathic macular hole in the contralateral eye using optical coherence tomography. Methods:
a prospective longitudinal descriptive study was conducted of a case series. The study sample was 208 eyes of 104 patients diagnosed with idiopathic macular hole attending outpatient consultation at the Retina Service of Ramón Pando Ferrer Cuban Institute of Ophthalmology from December 2008 to December 2011, after which period the patients were followed-up for five years. Evaluation was carried out of demographic variables, best corrected visual acuity and macular hole stage by optical coherence tomography, determining the stability, progression or regression of findings one and five years later in the contralateral eye. Statistical analysis was based on percentage and frequency comparisons, using the chi square statigram with a significance level of 95 percent. Results:
mean age was 65.8 years. Female sex prevailed. At the start of the study, 43.3 percent of the contralateral eyes presented alterations in the vitreo-macular interface. Significant differences were found between evolution at one and five years (p= 0.000) regarding the distribution of cases in the various stages. Stability was 78.3 percent at one year and 54.6 percent at five. Progression to more advanced stages was scant, with similar values in the two study periods (8.2 percent and 7.2 percent, respectively). Regression was 13.4 percent at one year and 38.1 percent at five. Posterior detachment of the entire vitreous was present in more than 60 percent of the eyes at the end of the study. Full thickness idiopathic macular hole developed in 4.8 percent of the contralateral eyes. There was vision reduction in patients with progression to more advanced stages (p= 0.001). Conclusions:
optical coherence tomography is an effective diagnostic method to evaluate anatomical changes in patients with idiopathic macular hole. Periodic follow-up is required for early determination of the most appropriate surgical management to achieve optimal visual recovery, since this is the second eye affected(AU)