Diagnóstico de meningitis tuberculosa
Diagnosis of tuberculous meningitis
Acta neurol. colomb; 31 (2), 2015
Publication year: 2015
La tuberculosis continúa siendo un problema mundial de salud pública y su presentación como meningitis tuberculosa es grave, ya que ocasiona una gran parte de muertes y discapacidad. El tratamiento temprano mejora el pronóstico, pero el problema radica en hacer el diagnóstico temprano, pues los síntomas clínicos son inespecíficos. Algunos hallazgos del líquido cefalorraquídeo pueden ser útiles, sin embargo la tinción de Ziehl-Neelsen pocas veces es positiva y el cultivo de LCR tarda mucho. Se ha probado la detección de ácidos nucleicos del Mycobacterium tuberculosis con resultados variables, los métodos indirectos como el ADA (adenosín deaminasa) y el ELISpot, al igual que la tuberculina, pueden aportar en algunos casos. Dado que no hay una prueba única, rápida, con buena sensibilidad y especificidad para el diagnóstico de meningitis tuberculosa, se presentan las principales reglas de predicción diagnóstica que suman elementos clínicos y de laboratorio para mejorar la precisión, a lo anterior se suman además los hallazgos de TAC y resonancia. El diagnóstico de la meningitis tuberculosa se logra teniendo en cuenta criterios epidemiológicos, estudios de laboratorio en sangre, líquido cefalorraquídeo y neuroimágenes. Es necesario continuar evaluando la utilidad de las reglas de predicción clínica en poblaciones diferentes a las de los estudios iniciales.
Tuberculosis is still a public health problem worldwide and it's meningeal form is a critical clinical condition, contributing great part of tuberculosis related deaths and disabilities. Although early treatment improves disease prognosis, managing a precocious diagnosis is a key problem because clinical symptoms are not specific. Even though some cerebrospinal fluid findings may be useful, Ziehl-Neelsen smear staining is seldom positive and culture results take a long time. While Mycobacterium tuberculosis nucleic acid detection has been tested producing very variable results, indirect methods such as ADA (adenosine deaminase) and ELISPOT and tuberculin skin testing (TST) may be helpful in some cases. Given there is no single, rapid test with good sensitivity and specificity for meningeal tuberculosis diagnosis, the main clinical prediction rules integrating clinical and laboratory aspects, are described. To improve accuracy, CT scan o MRI results are also added to the diagnostic workup process. Since meningeal TB diagnosis can only be achieved taking into account epidemiological, laboratory blood and cerebrospinal fluid testing as well as imaging, the utility of existing clinical prediction rules needs to be assessed in settings different from those where they were initially developed.