Transición del paciente adolescente con mielomeningocele en su paso al hospital de adultos
Transition of the adolescent patient with myelomeningocele to adult hospital care
Med. infant; 31 (2), 2024
Publication year: 2024
El acceso a una salud integral de calidad a lo largo de la vida
es un derecho de todos los adolescentes y jóvenes; pero sobre
todo resulta relevante en aquellos pacientes con enfermedades
complejas crónicas como el mielomeningocele pues de no
realizarse tiene repercusión notoria sobre su estado de salud
con mayor riesgo de morbimortalidad. En este artículo se
comenta la experiencia sobre transición de pacientes con
mielomeningocele que se realizó en forma organizada entre
los servicios de Consultorio de Mielomeningocele y Hospital
de día Polivalente del Hospital Garrahan y el Servicio de
Adolescencia del Hospital Ramos Mejía. Se trata de un nuevo
modelo asistencial de trabajo interdisciplinario y colaborativo
teniendo como eje una fluida comunicación interinstitucional.
Este acuerdo formal entre ambos hospitales contó con el
recurso humano especializado y la estructura física adecuada
para el abordaje integral de esta compleja enfermedad crónica.
Este programa propició un entorno al paciente que aseguró el
seguimiento por equipos interdisciplinarios. Esta es la mejor
opción para brindar un cuidado integral, equitativo, coordinado
y accesible mejorando la calidad de vida de los pacientes con
mielomeningocele a largo plazo (AU)
Access to quality comprehensive health throughout life is a
right of all adolescents and young people; but above all it is
relevant in those patients with complex chronic diseases such
as myelomeningocele because if it is not performed it has a
notable impact on their health status with a greater risk of
morbidity and mortality. This article discusses the transition
experience of patients with myelomeningocele that was carried
out in an organized manner between the Myelomeningocele
Clinic and Multipurpose Day Hospital services of the Garrahan Hospital and the Adolescence Service of the Ramos
Mejía Hospital. It is a new care model of interdisciplinary and
collaborative work with fluid inter-institutional communication
as its axis. This formal agreement between both hospitals
had specialized human resources and the appropriate physical structure for the comprehensive approach to this complex
chronic disease. This program provided an environment for
the patient that ensured follow-up by interdisciplinary teams.
This is the best option to provide comprehensive, equitable,
coordinated and accessible care, improving the quality of life
of patients with myelomeningocele in the long term (AU)