El agua es un recurso fundamental para la vida, no obstante, de ser esencial, es considerada como vehículo de enfermedades, debe reunir condiciones básicas de calidad.

Determinadas en esta investigaciones mediante análisis bacteriológico:

número más probable de coliformes totales, fecales y escherichia coli (métodos de tubos múltiples), y análisis parasitológico solución salina, lugol, faust y coloración de kin youn a 31 muestra de agua provenientes de diferentes fuentes de captación: grifos, filtros, pipotes, tanques y botellón. Encontrándose un elevado nivel de contaminación de 70,97 por ciento, con un recuento de aerobios mesófilos de 83,9 por ciento, coliformes totales 74,23 por ciento, fecales 67,8 por ciento, escherichia coli 67,8 por ciento y 80,64 por ciento de positividad para protozoarios como: blastocystis hominis, endolimax nana, giardia lamblia, criptosporidium sp, su presencia posiblemente se deba a fallas en los procesos de filtración y desinfección. Los indicadores bacteriológicos representan un criterio de calidad; pero no demuestran la presencia o ausencia de protozoarios en el agua, por ello se deben realizar. Además se realizó análisis coprológico de 27 escolares, observándose presencia de: endolimax nana, blastocystis hominis, giardia lamblia, criptosporidium sp, probablemente transmitidos por el consumo de agua contaminada. La calidad del agua no cumple con los criterios establecidos por la OMS/OPS (1998) haciéndolo no apta para el consumo humano