Laparostomía contenida: experiencia del Hospital de Urgencias Asistencia Pública Dr. Alejandro del Río
Contained laparostomy: experience at Hospital de Urgencias Asistencia Pública Dr. Alejandro del Río
Rev. chil. cir; 50 (3), 1998
Publication year: 1998
La laparostomía contenida es un procedimiento quirúrgico que consiste en dejar la cavidad peritoneal conectada al exterior para manejo de la sepsis abdominal y parietal. Se presenta la experiencia de la Asistencia Pública de Santiago en dicho procedimiento, en el período comprendido entre el 1 de enero de 1991 y el 30 de junio de 1994. Se revisan retrospectivamente 99 pacientes con laparostomías contenidas a través de un protocolo previamente confeccionado. Los pacientes corresponden a 47 hombres y 52 mujeres con edad promedio de 50,5 años (15-91 años). La patología apendicular aparece con mayor frecuencia con 21,2 por ciento, seguida de intestino delgado (20,2 por ciento), páncreas (18,2 por ciento), intestino grueso (13,1 por ciento) y biliar (9,1 por ciento). La mayor mortalidad está asociada al páncreas con 66,7 por ciento, seguido de patología biliar con 55,6 por ciento. La mortalidad en la laparostomía efectuada en la primera operación es de 45,3 por ciento, 47,2 por ciento en la segunda, 50,0 por ciento en la tercera, 66,7 por ciento en la cuarta, 100 por ciento en la quinta. Los pacientes con ostomías agregadas alcanzan mortalidad de 60 por ciento. El promedio de aseos peritoneales fue de 2,53, con mortalidad de 16,7 por ciento sin aseos hasta 100 por ciento con 9 aseos. Hubo 3 por ciento de f ístulas atribuibles al procedimiento con 66,7 por ciento de mortalidad. De los pacientes que reciben apoyo nutricional (52,5 por ciento), 42,3 por ciento fallecen en comparación a un 53,2 por ciento de mortalidad sin apoyo nutricional. Hubo 86,9 por ciento de pacientes con complicaciones médicas destacando las sépticas, respiratorias y renales (62,6 por ciento, 44,4 por ciento y 30,3 por ciento respectivamente). La mortalidad global es de 47,5 por ciento. El promedio de hospitalización es 27,3 días (2-110 días). Se concluye que es una técnica con una alta morbimortalidad, en estrecha relación con la patología por la cual se indicó. Su indicación debe ser excepcional y precisa