La medición de efectos de la contaminación atmosférica en poblaciones, impone desafíos metodológicos muy serios que pueden ser responsables de que aún no se pueda identificar en forma consistente riesgos cuatitativamente más importantes asociados a la contaminación atmosférica. Una veta promisoria en el estudio de estos efectos se vislumbra en la utilización de marcadores biológicos tanto de la exposición -la contaminación- como del efecto biológico. Muchas de estas técnicas son aún muy costosas como para su utilización en estudios poblacionales y, además, imponen exigencias técnicas difíciles de cumplir en el trabajo de campo. Sin embargo, cada dís se hacen más accesibles y podrán fortalecer considerablemente los hallazgos obtenidos. Para ello cada vez más deberán constituirse equipos multidisciplinarios que concilien las diferencias técnicas en juego