Rev. chil. obstet. ginecol; 72 (2), 2007
Publication year: 2007
ANTECEDENTES:
Una de las asociaciones más controversiales con respecto al uso de anticonceptivos orales (ACO) corresponde al eventual aumento de riesgo de desarrollo de cáncer de mama. OBJETIVO:
Determinar si la evidencia disponible en la actualidad apoya esta asociación. MÉTODO:
Se analizaron cinco trabajos de un total de doce revisados, de acuerdo a los criterios y niveles de evidencia propuestos por la Universidad de Oxford. RESULTADOS:
Pudimos inferir que en base a la evidencia actual el uso de ACO sí se relaciona con un aumento del riesgo de presentar cáncer de mama durante y una vez suspendido su uso. Sin embargo, este riesgo se iguala al de la población no usuaria a los diez años post suspensión de ACO. Esta relación sería independiente a la cantidad de años de uso de anticonceptivos, y tendría relación con la cantidad de estrógeno contenida por cada tipo particular de anticonceptivo. CONCLUSIÓN:
Serán necesarios nuevos estudios que evalúen las formulaciones más recientes de anticonceptivos cuando las usuarias alcancen la edad de mayor incidencia de cáncer de mama (40-60 años).
BACKGROUND:
One of the most controversial associations regarding the use of oral contraceptives has been the possibility of increasing risk of developing breast cancer. OBJECTVE:
To determine if the available evidence supports that association. METHODS:
We analyzed 5 articles of a total of 12 that were reviewed. We used the levels of evidence and grades of recommendation of the Oxford-Centre for Evidence-Based Medicine. RESULTS:
We were able to infer that, based on the available evidence, the use of oral contraceptives correlates with an elevated risk of developing breast cancer during and after ending it's use. This risk equals that of the non users after 10 years post cessation of use. This association would be independent of the amount of years the contraceptives were used but would be correlated with the amount of estrogen that they contain. CONCLUSION:
New studies that evaluate the new contraceptive formulations must be undergone when their users reach the age of highest incidence of breast cancer (40-60 years).