Se presenta una serie de 64 pacientes, 18 del sexo masculino y 46 del femenino, que fueron sometidos a osteotomía tibial o femoral para corregir defectos angulares por artrosis unicompartimental primaria de la rodilla; 16 casos tenían artrosis bilateral, lo que dio un total de 80 osteotomías. De un total de 119 pacientes atendidos por el mismo diagnóstico, se ecluyó a los que presentaban artritis traumática, secuelas de cirugía o artritis de otra clase. Hubo 74 tibiales en cuña de cierre correctora de varo, uno en cuña de cierre correctora de valgo, dos supracondíleas femorales correctoras de valgo y tres semicirculares tipo Maquet. Los pacientes se dividieron en dos grupos, el primero con evolución postoperatoria de tres meses a tres años cuyo resultado fue el siguiente: de las osteotomías tibiales correctoras de varo, el resultado fue bueno en 25 de 32 en las que se hizo hipercorrección, regular en siete y malo en uno. En ocho la corrección fue a lo normal, y el resultado fue bueno en siete y regular en uno. La corrección fue insuficiente en cinco rodillas, siendo el resultado bueno en dos y regular en tres. El segundo grupo se valoró de tres a seis años de postoperatorio, fueron 28 osteotomías y el tresultado fue, de nueve con hipocorrección, bueno en seis, regular en dos y malo en uno. En los seis en que se corrigió a lo normal, el resultado fue bueno en seis y regular en dos; finalmente de los 13 que tuvieron hipercorrección el resultado fue bueno en ocho y regular en cinco. De las tres osteotomías de Maquet, dos quedaron hipercorregidas, una con buen resultado y otra con recurrencia de la deformidad. Se concluye que es necesario hipercorregir las osteotomías tibiales correctoras en cuña de cierre para obtener mejores resultados. La técnica de Coventry èrmite resultados más estables que en la de Maquet