Impacto del virus de inmunodeficiencia humana sobre manifestaciones reumatológicas en poblaciones de alto riesgo
Rev. mex. reumatol; 8 (6), 1993
Publication year: 1993
Las manifestaciones reumáticas de han reportado hasta en el 71 por ciento de los pacientes con infección por VIH, frecuentemente en estadios avanzados. Objetivo. Determinar el impacto en la frecuencia de manifestaciones reumáticas en pacientes con infección por VIH, comparados con controles de poblaciones similares VIH -. Pacientes y métodos. Se estudiaron en forma prospectiva, descriptiva y observacional 128 pacientes VIH+, 103 hombres y 25 mujeres, con edad promedio de 31.5 años (grupo I), comparándose con 130 pacientes con factores de riesgo semejantes, pero con serología negativa para VIH (Grupo II). Resultados. En el grupo I se identificaron alteraciones en 85/128 (66 por ciento); 52 tuvieron artralgias, 42 mialgias, entesitis y bursitis en 29, artritis asimétrica en 9 casos; y con hipersensibilidad, incapacitante y autolimitada en 7 pacientes. En este mismo grupo se encontró síndrome de Reiter en 10 casos (7 por ciento), fibromialgia en 10 (5 por ciento), complejo sicca, osteonecrosis, dermatopolimiositis, artritis séptica y podagra. En el grupo II, 6/130 pacientes (4 por ciento), tuvieron alteraciones menores (fibromialgia y artralgias) (p < 0.0001). Laboratorio. La eritrosedimentación acelerada (Grupo I) en 87/128 (67 por ciento), factor reumatoide 24/128 (18 por ciento), TTP prolongado 39/128 (30 por ciento), VDRL+ falso en 11/128 (8 por ciento), anticuerpos antinucleares en 16/128 (12 por ciento), anticuerpos anticardiolipina IgC 116/128 (86 por ciento), IgM 52/128 (40 por ciento). Se encontró hiperuricemia en 48/128 (37 por ciento) del grupo I y en 2 del grupo II (p < 0.0001), mientras que hipouricemia sólo en 6 pacientes VIH+. Once de dieciséis pacientes con sarcoma de Kaposi y enfermedades linfoproliferativas tuvieron alteraciones en los niveles de urato. Conclusiones. Las manifestaciones reumatológicas son frecuentes en pacientes VIH+, y su presencia puede indicar infección temprana en poblaciones de riesgo. En etapas tardías, la presencia de hiperuricemia puede ser utilizada como marcador y/o predictor de neoplasia