Por que siguen siendo tan altas las tasas de mortalidad por malnutricion grave?
Why have mortality rates for severe malnutrition remained so high?
Rev. panam. salud pública; 1 (4), 1997
Publication year: 1997
La revisión de las publicaciones que han aparecido en los últimos cinco decenios revela que la mediana de la tasa de letalidad de la malnutrición grave no se ha modificado en ese período y que suele oscilar de 20 a 30%, con los mayores porcentajes (50 a 60%) atribuibles a los casos de malnutrición edematosa. Una causa probable de la persistencia de la mortalidad elevada es el tratamiento inapropiado de los casos. Según una encuesta de centros de tratamiento en distintas partes del mundo (n = 79), es común que a los niños con enfermedad aguda se les prescriban dietas inadecuadas con un alto contenido de proteínas, energía y sodio y un bajo contenido de micronutrientes. Se encontró que ciertas prácticas que podrían acarrear consecuencias funestas, como la prescripción de diuréticos para el edema, estaban ampliamente difundidas. También se comprobó que muchos de los manuales de instrucción eran anticuados y encerraban contradicciones. Ya que se pueden lograr tasas bajas de mortalidad por malnutrición con los tratamientos apropiados, es preciso formular y aplicar pautas terapéuticas actualizadas, de carácter práctico y prescriptivo más que descriptivo, como parte de un programa integral de capacitación.
A review of the literature that has appeared over the past five decades indicates that the median case fatality from severe malnutrition has remained unchanged over this period and is typically 20–30%, with the highest levels (50–60%) being among those with edematous malnutrition. A likely cause of this continuing high mortality is faulty case-management. A survey of treatment centres worldwide (n = 79) showed that for acutely ill children, inappropriate diets that are high in protein, energy and sodium and low in micronutrients are commonplace. Practices that could have fatal consequences, such as prescribing diuretics for edema, were found to be widespread. Evidence of outmoded and conflicting teaching manuals also emerged. Since low mortality levels from malnutrition can be achieved using appropriate treatment regimens, updated treatment guidelines, which are practical and prescriptive rather than descriptive, need to be implemented as part of a comprehensive training programme.