Perspectiva fenomenológica de los trastornos de personalidad
Phenomenological perspectives of personality disorders
Rev. psiquiatr. (Santiago de Chile); 3 (10/11), 1986
Publication year: 1986
El concepto de "trastorno de personalidad" es muy amplio, hasta el punto de contener cuadros tan disímiles como la personalidad esquizoide y las perversiones sexuales. Como introducción a una perspectiva fenomenológica de las anormalidades de la personalidad, sugerimos buscar los rasgos esenciales de los dos componentes de este concepto: personas y/o personalidad, normalidad-anormalidad. En lo que se refiere al primer punto, remitimos al concepto griego de persona, máscara, en el cual creemos encontrar dos elementos esenciales: la permanencia de lo idéntico a través de lo diferente, vale decir, entre la identidad de si mismo e identidad de rol. La capacidad de desplegar sus potencialidades en el tiempo y/o la unilaterización de determinados proyectos de mundo parece ser un rasgo bastante común en las personalidades anormales. El análisis de algunos de los tipos de personalidades más frecuentes, como la histérica, la depresiva, la obsesiva y la esquizoide, permite establecer diferencias fundamentales en lo que respecta a las relaciones entre la identidad del Yo y la identidad del rol, la que podría, a su vez, sentar las bases de una nueva comprensión de este tipo de patologías. En lo que se refiere al segundo punto, se analiza el orígen del concepto de normalidad (norma, escuadra, regla) y sus distintas formas de ser aplicadas en la psiquiatría desde Kant hasta nuestros días. Se critica el concepto Schneideriano de personalidad anormal como desviación de una mera "norma promedio neutral". Se intenta llegar a una determinación esencial del concepto de "anormalidad" en psiquiatría, destacando su relatividad en la medida que puede ser ella condición de un desarrollo del genio, máxima expresión de la salud mental. También se señala la existencia de la normalidad patológica (o normopatía), donde la falta de libertad en el sentido de tener que comportarse en forma normal puede ser la condición para la génesis de una enfermedad como la depresión. Por último, y siguiendo a Blankenburg, se plantea la necesidad de la aplicación del pensamiento dialéctico al estudio de las personalidades anormales. Estas aparecerían ordenadas en polaridades complementarias. Cada una de las grandes estructuras o tipos psicopatológicos consistiría en la desviación hacia un polo de la alternativa, lo que debería entenderse no como mera deficiencia, sino como una forma (en cierto modo positiva) de huir de la alternativa contraria, al modo como la manía puede ser entendida como el escapar