Contaminación por monóxido de carbono: un problema de salud ambiental
Carbon monoxide contamination: an environmental health problem
Rev. salud pública; 8 (1), 2006
Publication year: 2006
El monóxido de carbono es considerado uno de los mayores contaminantes de la atmósfera terrestre. Sus principales fuentes productoras responsables de aproximadamente 80 por ciento de las emisiones, son los vehículos automotores que utilizan como combustible gasolina o diesel y los procesos industriales que utilizan compuestos del carbono. Esta sustancia es bien conocida por su toxicidad para el ser humano. Sus efectos tóxicos agudos incluida la muerte han sido estudiados ampliamente; sin embargo, sus potenciales efectos adversos a largo plazo son poco conocidos. En los últimos años, los estudios de investigación experimentales en animales y epidemiológicos en humanos han evidenciado relación entre población expuesta en forma crónica a niveles medios y bajos de monóxido de carbono en aire respirable y la aparición de efectos adversos en la salud humana especialmente en órganos de alto consumo de oxígeno como cerebro y corazón. Se han documentado efectos nocivos cardiovasculares y neuropsicológicos en presencia de concentraciones de monóxido de carbono en aire inferiores a 25 partes por millón y a niveles de carboxihemoglobina en sangre inferiores a 10 por ciento. Las alteraciones cardiovasculares que se han descrito son hipertensión arterial, aparición de arritmias y signos electrocardiográficos de isquemia. Déficit en memoria, atención, concentración y alteraciones del movimiento tipo parkinsonismo, son los cambios neuropsicológicos con mayor frecuencia asociados a exposición crónica a bajos niveles de monóxido de carbono y carboxihemoglobina.
Carbon monoxide is considered to be a major factor contaminating earths atmosphere. The main sources producing this contamination are cars using gasoline or diesel fuel and industrial processes using carbon compounds; these two are responsible for 80 percent of carbon monoxide being emitted to the atmosphere. This substance has a well-known toxic effect on human beings and its acute poisonous effects (including death) have been widely studied; however, its long-term chronic effects are still not known. During the last few years, experimental research on animals and studies of human epidemiology have established the relationship between chronic exposure to low and middle levels of carbon monoxide in breathable air and adverse effects on human health, especially on organs consuming large amounts of oxygen such as the heart and brain. Harmful cardiovascular and neuropsychological effects have been documented in carbon monoxide concentration in air of less than 25 ppm and in carboxyhaemoglobin levels in blood of less than 10 percent. The main cardiac damage described to date has been high blood pressure, cardiac arrhythm and electrocardiograph signs of ischemia. Lack of memory, attention, concentration and Parkinson-type altered movement are the neuropsychological changes most frequently associated with chronic exposure to low levels of carbon monoxide and carboxyhaemoglobin.