Estudia el impacto de la mejora de la higiene personal y doméstica en la morbilidad sobre la base de datos obtenidos en hospitales, guarderias infantiles y comunidades. Se determinó que el bajo nivel de educación predispone a las enfermedades diarreicas; la práctica más estudiada fue del lavado de manos. Este estudio demostró que las enfermedades infecciosas intestinales pueden propagarse a través de manos contaminadas y que este riesgo puede eliminarse con el lavado de mano con agua y jabón. Señala además que la morbilidad y mortalidad de niños menores de 5 años se debe principalmente a enfermedades diarreicas por lo que es necesario fomentar un conjunto de medidas como la rehidratación oral y medidas preventivas antidiarreicas aplicadas de manera simultánea