El estado de nutrición es consecuencia de diferentes conjuntos de interacciones de tipo biológico, psicológico y social. Tal diversidad obliga a la especificación cuando se trata de evaluar el estado de nutrición. Los indicadores a utilizar dependen de la finalidad de la evaluación y de los resultados que se esperan. Entre diversos y diferentes factores, se deberá tomar en cuenta la perspectiva del análisis (epidemiológica, clínica o básica), las condiciones ambientales (altitud, clima, condiciones sanitarias, contaminantes ambientales, entre otros), las características de los individuos o de las comunidades a evaluar (sexo, edad, estado fisiológico y de salud, actividad, herencia, antecedentes personales, cultura, hábitos, entre otros) y las características y cantidad de los alimentos (disponibilidad, costo, contenido de nutrimentos, toxicidad, contaminación, mezclas utilizadas, entre otras). Por tanto, la evaluación del estado de nutrición será tan objetiva como lo sean la concreción de sus objetivos y vinculación de los indicadores elegidos.

Este trabajo comprende los siguientes apartados:

1.- Características generales. 2.- Evaluación dietética: recomendaciones nutricionales; composición nutrimental de los alimentos; técnicas de evaluación. 3.- Evaluación antropométrica: indicadores; masa corporal; índice de masa corporal; grasa subcutánea; área muscular del brazo; mediciones especiales; técnicas de medición; talla; peso; pliegues cutáneos; perímetro cefálico; fondo uterino; índice cintura-cadera; brazada; técnicas de homogeneización; evaluación de resultados. 4.- Evaluación clínica. 5.- Evaluación bioquímica. 6.- Pruebas inmunológicas. 7.- Estudios de balance. 8.- Evaluación subjetiva. Tablas de talla y peso