Rev. cuba. pediatr; 90 (2), 2018
Publication year: 2018
Introducción:
una alimentación muy selectiva y poco variada durante la primera infancia, puede modificar seriamente los índices de riesgo cardiovascular, ante lo cual, la detección de la alteración lipídica es de suma importancia para promover e implementar el cambio de hábitos.
Caso clínico:
se presenta una niña de 6 años con una dieta a base de alimentos industriales, a quien se le realizó un perfil lipídico, por considerar que la alimentación tan limitada que consumía era un factor de riesgo aterogénico. Esto permitió diagnosticar una marcada disminución del HDL-colesterol, hipertrigliceridemia y franca alteración de los índices de riesgo.
Discusión:
existe una relación directa entre la hipertrigliceridemia y el consumo de azúcares simples, presentes en las golosinas, postres o gaseosas. Además, las grasas saturadas e industriales (trans) son responsables de la disminución del colesterol HDL. Llamó la atención la contundencia que ejerció la alteración del laboratorio, sobre el accionar de los padres. Luego de 6 meses de poner en práctica las indicaciones, los valores y los índices de riesgo se normalizaron.
Conclusiones:
se destaca la importancia de realizar un perfil lipídico en niños mayores de 2 años cuando se detecta el consumo de una dieta aterogénica, dado que el descenso de colesterol HDL tiene relación directa con la alimentación y el estilo de vida. Un valor inferior a 45 mg/dL es un factor de riesgo que puede ser modificado(AU)
Introduction:
a very selective and little varied diet during early childhood can seriously modify the cardiovascular risk indexes, and because of that the detection of lipid alteration is very important to promote and implement the change of habits.
Clinical case:
a 6-year-old girl was presented with a diet based on industrial foods. A lipid profile was made considering that the very limited diet she consumed was an atherogenic risk factor. This allowed diagnosing a marked decrease in HDL-cholesterol, hypertriglyceridemia and real alteration in the risk indexes.
Discussion:
there is a direct relation among hypertriglyceridemia and the consumption of simple sugars, which are present in sweets, desserts or sodas. In addition, saturated and industrial (trans) fats are responsible for lowering HDL cholesterol. It was significant the impact of the alteration in the laboratory results in the actions taken by the parents. After 6 months of putting the indications into practice, the values and risk indexes were normalized.
Conclusions:
it is highlighted the importance of performing a lipid profile in children older than 2 years when the consumption of an atherogenic diet is detected, since the decrease in HDL cholesterol is directly related to diet and lifestyle. A value below 45 mg/dL is a risk factor that can be modified(AU)