Plantas medicinales de la subregión andina
Medicinal plants of the Andean subregion
Publication year: 2014
La riqueza de la flora subregional asociada con el inmenso saber ancestral de las poblaciones nativas,
hace de la medicina tradicional y, particularmente, de las plantas medicinales, un determinante muy
importante de articulación con los sistemas nacionales de salud. Este saber, aún disperso, necesita
ser integrado con el fin de poder ser utilizado de manera óptima. La articulación e integración de las plantas
medicinales a los sistemas de salud se está recién impulsando en los países de la subregión, y para ello
se están realizando numerosos esfuerzos aunque todavía falta un largo proceso, específicamente, en la
investigación y la reglamentación, con el fin de permitir su accesibilidad a todos y en condiciones de seguridad.
En todos los pueblos, desde los más primitivos hasta los más avanzados, el ser humano siempre ha utilizado
las plantas en el campo de su alimentación, así como en el campo curativo físico y espiritual, para cuidarse y
prevenir enfermedades. Cuando el hombre primitivo se hallaba enfermo, poco podía hacer, sino recurrir a las
plantas. Del empleo de estas, surgieron muchos tratamientos empíricos muy eficaces. Con el tiempo, han
concordado con los componentes activos descubiertos por la bioquímica. Este saber ancestral en el curso de
los siglos se desarrolló y transmitió verbalmente de generación en generación.
Viviendo en un ambiente con una flora muy fértil y variada, el pueblo andino pudo, a lo largo de su historia,
desarrollar numerosos conocimientos sobre la utilización de las plantas en la medicina. Luego de la
conquista del continente por los europeos, los pueblos indígenas se habían retirado a lugares inhóspitos, a
la selva profunda o a las altas mesetas montañosas, para aislarse de los recién llegados. Posteriormente,
fueron a vivir en pequeñas comunidades, desarrollando y mantenimiento un saber viejo de centenas de
años. Contamos actualmente con más de 200 naciones indígenas originarias que habitan la región andina
y poseen cada una sus propios conocimientos, transmitidos por vía oral, difundiendo este conocimiento
entre las diferentes poblaciones2. Numerosos documentos se han publicado sobre las plantas medicinales,
presentando información sobre sus propiedades botánicas y curativas, sin embargo estas terapéuticas no
son reconocidas e integradas en su totalidad en los sistemas de salud.
En este contexto, considerando que en la subregión andina se encuentran pueblos que tienen un saber
ancestral que hace uso de la flora con fines terapéuticos; el ORAS-CONHU estableció en su Política Andina de Medicamentos “promover la investigación científica regional tomando cuenta de la realidad andina sanitaria
y epidemiológica”.