Seguridad y salud en el centro del futuro del trabajo: aprovechar 100 años de experiencia
Publication year: 2019
Según estimaciones recientes publicadas por
la Organización Internacional del Trabajo (OIT),
2,78 millones de trabajadores mueren cada
año de accidentes del trabajo y enfermedades
profesionales (de los cuales 2,4 millones están
relacionados con enfermedades) y 374 millones
de trabajadores sufren accidentes del trabajo
no mortales. Se calcula que los días de trabajo
perdidos representan cerca del 4 por ciento del
PIB mundial y, en algunos países, hasta el 6 por
ciento o más (Hämäläinen y otros autores, 2017;
Takala y otros autores, 2014).
Además del costo económico, existe también un
costo intangible, que no reflejan estas cifras, de
sufrimiento humano imposible de medir provocado por los accidentes del trabajo y las enfermedades profesionales. Esta situación es triste y
lamentable porque, como han demostrado repetidamente la investigación y la práctica del pasado
decenio, pueden prevenirse en gran medida.
Los riesgos psicosociales, el estrés relacionado
con el trabajo y las enfermedades no transmisibles preocupan cada vez más a gran número de
trabajadores de todo el mundo. Al mismo tiempo,
muchos trabajadores siguen haciendo frente a
riesgos persistentes para la seguridad y la salud
relacionados con el trabajo y es importante no
pasarlos por alto cuando miramos hacia el futuro.