Se realiza un estudio prospectivo de la reacción situacional en niños, durante el quinquenio 1981-85 con el objetivo de ampliar el conocimiento existente acerca de los factores participantes en la aparición y pronóstico, teniendo en cuenta la interacción que se establece en la tríada agente (evento-vital)-huesped (niño)-medio (familia), sin absolutizar los factores externos o internos. Para ello se empleó el método del historicismo. De 140 pacientes, 59 mantienen conducta neurótica posterior al año del diagnóstico. Los eventos predominantes son el escolar y familiar, los que se relacionan con la buena y mala evolución respectivamente. El evento tiene un carácter novedoso en la relación que se establece con el niño, donde influye el aprendizaje previo y es decisivo el momento histórico concreto, en que acontece.

Existen factores de riesgo a tener en cuenta para la probabilidad de mala evolución como son:

la concomitancia de patología psiquiátrica en el medio familiar, una edad menor de 10 años y un temperamento predominantemente melancólico, a lo cual se sobreañade un soporte social pobre. El rechazo, el maltrato y culpabilidad por el método educativo predominante en los de mala evolución destacándose además la autoridad dividida y los castigos como medida disciplinaria empleadas por los padres