Se hizo un estudio de prevalencia de punto en dos fábricas de muebles de maderas duras en 156 trabajadores expuestos a polvo de madera, en la búsqueda de asma ocupacional y enfermedades rinobronquiales. Hubo 8 pérdidas por razones ajenas a la investigación, quedando 148 trabajadores como grupo de estudio; a estos se les aplicó un cuestionario de síntomas respitatorios y se les hizo seguimiento espirométrico pre y postjornada de trabajo. Igualmente se hizo un estudio de higiene ambiental para cuantificar polvo respirable de madera en 23 puestos de trabajo reseleccionados, por método gravimétrico según técnicas de la NIOSH. Se encontró una proporción de prevalencia de 8.8 por ciento de asma ocupacional, 32,4 por ciento de sospecha de asma ocupacional, 44,6 por ciento de rinitis alérgica, 12.8 por ciento de bronquitis crónica y 12.2 por ciento de bronquitis industrial, los cuales en general se encontraron asociados a variables de edad (P<0.05), tiempo de exposición a polvo de madera (P<0.05) concentración de polvo de madera (P<0.05) y sexo femenino (P<0.05), cargos como lijador, ebanista y pulidor y secciones de máquinas y ebanistería. Se ajustaron por tabaquismo y uso de elementos de protección respiratoria, que se comportaron como variables de confusión. La falta de métodos de control adecuados del polvo de madera, la selección y el uso inadecuado de elementos de protección respiratoria, la falta de protocolos de manejo médico-preventivo para su evaluación y manejo, son los principales aspectos que se recomienda deben mejorarse para disminuir el problema