Se ralizó un trabajo de investigación experimental prospectivo, transversal a doble ciego, en un centro quirúrgico particular, en los meses de abril y mayo de 1995, con 60 voluntarios sanos, los que fueron sometidos a infiltración subcutanea de soluciones en estudios para la valoración de diferencia en percepción de intensidad dolorosa entre ambas. Las soluciones fueron previamente sometidas a valoración de ph, haciendo uso de un potenciómetro, en donde se obtuvo que para la SOLUCION A: lidocaína al 2 por ciento con epinefrina, preparación comercial, los niveles de ph fueron de 4; y para la SOLUCION B: lidocaína al 2 por ciento con epinefrina preparación comercial más 1 meq. de bicarbonato de sodio por cada 10 ml de solución, los niveles de ph fueron de 7; manteniéndose iguales más allá de una semana a temperatura ambiente. Se instruyó a los pacientes, antes de la experiencia, la manera de responder según las diferentes escalas de valoración de dolor. Al realizar las infiltraciones comparativas en ambos antebrazos, se determinó; que la infiltración de la solución B producía menos dolor, en relación a la solución A, (79.59 por ciento). Similares resultados se encontraron al aplicar la escala verbal numérico y la escala análoga visual. La diferencia encontrada en ambas soluciones, son altamente significativas, al ser sometidas a pruebas estadísticas, (p<0.0001, en cada una de ellas). Se atribuye la existencia de dolor, a la variación del ph que sufre la solución B cuando se le añade el bicarbonato de sodio, ya que este tiende a la neutralidad y ph fisiológico