Cuarenta pacientes con enfermedad hemorroidal fueron agrupados en 2 grupos de 20 pacientes al azar. El grupo A para una hemorroidectomía abierta, y el grupo B para una hemorroidectomía semi-abierta. El propósito del trabajo fué investigar las posibles ventajas de la técnica semi-abierta sobre la abierta, analizar y comprobar la incidencia de dolor, tiempo de hospitalización, defecación de recuperación y complicaciones de cada técnica para evaluar la ventaja de una frente a la otra. Todos los pacientes tuvieron seguimiento diario las primeras 72 horas, luego a la semana y posteriormente al mes, o hasta la curación completa. Se indicó analgésico en el postoperatorio el ketoprofen, y a todos los pacientes se les indicaba una dosis diaria de agarol y una dosis diaria de metamucil vía oral con la finalidad de facilitar la defecación. Se anotó la dosis, ruta y tiempo de hospitalización postoperatorio y el tiempo de aparición de la primera evacuación. Se registró el tiempo en el cual el paciente se reincorporó a sus labores diarias y se anotó cualquier complicación observada. No se observaron diferencias estadísticamente significativas entre las dos técnicas, al comparar cada una de las variables antes expuestas, p>0,05. Por lo cual se concluye que ambas técnicas pueden ser aplicadas de forma indistinta para el tratamiento de las hemorroides, y que su uso dependerá de la experiencia, técnica y gusto del cirujano