La presente investigación se llevó a cabo en la ciudad de Resistencia (Chaco) durante los meses de julio, agosto y setiembre de 1996. El objetivo básico fue conocer y caracterizar la comunicación en los niños sordos e hipoacúsicos que concurren a la Escuela Especial Nro. 7 "Julia O. Cubilla". Para llevar a cabo este estudio, una vez circunscriptos los objetivos propuestos, se determinaron las variantes a analizar en la población. Se seleccionó la muestra representativa sobre la cual se aplicaron las guías de observación, elaboradas especialmente para ser utilizadas en dos situaciones escolares diferentes (clase y recreo). También se diseñó una encuesta dirigida a los padres de comunicación de sus hijos en el hogar. Una vez recogidos los datos, se organizaron y analizaron según los criterios definidos de interpretación: Se pudo observar que: - Hay una intima relación entre la modalidad de comunicación y el tipo de interlocutor oral. - Cuando la interacción se da cn un oyentem hay una mayor utilizaciñon del lenguaje oral. - La mayoría de los alumnos (sordos) utilizan como formas espontáneas y naturales de comunicación: gestos supletorios, señas. lenguaje corporal (mímicas faciales y/o corporales), etc. Esto lleva a la conclusión de que el oyente (adulto generalmente) es quien propicia la utilización del lenguaje oral en su afán de oralizar, igualmente eficaces para la expresión y desarrollo integral del niño discapacitado auditivo.

Se hace incapie en la necesidad de:

-Aunar criterios de intervención entre los profesionales que trabajan con niños sordos y su familia. -Tener en cuenta particularidades, porque sólo contemplándolas se podrá evitar conducirlo hacia lo que puede ser una mayor o menor privación del acceso al lenguaje y por consiguiente a la cultura. -Respetar la libertad de elección de los modos de comunicación y estilos de interacción, por parte de los interesados. También se destaca la importancia de brindar a la familia del deficiente auditivo, la variedad de sistemas comunicativos de los cuales pueden valerse y establecer a su vez interacciones satisfactorias con sus hijos