Colombia enfrenta en la actualidad múltiples problemas que tienen honda repercusión sobre la salud de la población, dentro de los que cabe destacar la violencia, la inequidad, la pobreza y el deterioro del ambiente. Esta situación, compartida por muchos países de la región, puede ser entendida como un producto de los cambios acelerados que ha experimentado la economía y la conformación sociopolítica del país en los últimos 10 años. Desde una óptica regional se observa que a pesar de los intentos del gobierno por mantener unas tasas razonables de crecimiento económico, los cambios sociales, consecuentes en buena parte a las distintas expresiones de la violencia, lesionan las posibilidades regionales de empleo y favorecen el ingreso de nuevos sectores a la pobreza absoluta. En el área rural el narcotráfico y el hallazgo de recursos naturales movilizan grupos armados que se enfrentan por el dominio de tales actividades, con consecuencias profundas sobre el orden social, con un aumento de la criminalidad rural y de las distintas formas de manifestación de la violencia institucionalizada, que repetidamente pone a prueba la capacidad de gobernabilidad del Estado. En consecuencia, se producen desplazamientos progresivos de la familia campesina con un aumento progresivo de los cinturones urbanos de miseria, violencia e inseguridad ciudadanas. Ello, sumado a los rápidos cambios poblacionales de la pirámide de edades, transforma la red social básica que experimenta cambios...(TRUNC.)