Se realizó un estudio descriptivo, transversal con el fin de establecer la relación entre el índice Biespectral del electroencefalograma, las variables hemodinámicas como indicadores clásicos de la profundidad anestésica como la PAM y FC y un protocolo de Ataranestesia a dosis bajas de Midazolam en infusión continua; se eligierón para tal efectol a 42 pacientes que fueron considerados aptos para ser incluidos en el estudio a partir de criterios de inclusión y exclusión. Se procedio a calcular la presión arterial media como un indicador de la eficacia del sistema cardiovascular para prefundir órganos vitales como el riñón, basado en el hecho de que las drogas anestésica provocan modificaciones en dicho sistema y de acuerdo a los criterios fisiopatológicos propuestos por Greene Y Brull; por otro lado se categorizó la frecuencia cardíaca de acuerdo al número de latidos cardíacos por minuto. Se determinó que los valores de BIS obtenidos en la población a partir de valores basales tanto de la PAM como de la FC y del mismo BIS, fueron significativamente diferentes, logrando descensos de los valores de BIS desde la inducción anestésica hasta los 80 minutos de la anestesia (p<0.05 en todos los tiempos), por otro lado no existieron diferencias significativas entre las diferentes categorías de PAM y FC (p>0.05 en todos los tiempos), considerándose este hallazgo como la de variaciones individuales de los valores de BIS ante una dosis de droga hiopnóptica como lo es el midazolam, al no existir relación entre las variaciones hemodinámicas con los valores de BIS, se condideran a las mismas como indicadores no probables de la profundidad hipnótica. Se considera la necesidad de extender los estudios del monitoreo de la actividad cerebral a otras drogas anestésicas, protocolos anestésicos que abarquen situaciones específicas de pacientes con condiciones físicas y patológicas diversas, así como la de las cirugías ambulatorias en nuestro hospital