El Pacifismo activo: de la cultura de la violencia a la de la paz
Publication year: 1991
La No Violencia como instrumento para manejar en forma adecuada los conflictos, es algo que la mayoría no hemos aprendido. Mejor, no nos han educado para ello. Dificilmente reaccionamos ante el conflicto con el diálogo y la negociación. Este es el nuevo aprendizaje que debemos realizar. El conflicto es un tipo de enfrentamiento en que cada una de las partes trata de ganar. Para que esto suceda el otro tiene que perder. Pensamos que la única fuerza capaz de oponerse a la violencia es ejercer más violencia; de hecho, la única fuerza capaz de oponerse a la violencia es la justicia; a la mentira, la verdad; al odio, el amor. Esto generalmente no lo comprendemos. Vamos como en contravía. Nos hemos educado al revés. Si el conflicto acompaña siempre la vida, lo obvio es que nos hubieran enseñado a manejarlo desde niños, adecuadamente, a la altura de nuestra racionalidad. Pero no ha sido así. Incluso concebimos la paz y la felicidad como ausencia de conflicto, cuando en realidad la paz no es ausencia de conflicto; es, ante todo, saberlo manejar o, puesto de otra manera, es la ausencia de la injusticia. Se puede vivir en paz y feliz aun en medio del conflicto. El no-violento dice NO a todas las formas de violencia. Cuando cada uno interioriza la verdad, entonces es capaz de hablar y de actuar contra la violencia y contra la injusticia aunque le maten, sin mantenerla con la debilidad, la cobardía y el silencio.