La mayor parte de los usuarios de PROVIDA son de origen cundinamarques y boyacense, de sexo femenino en su mayoría; sus edades oscilan entre 60 y 74 años, con una alta tasa de viudez aunque también los hay casados, se encuentra el fenómeno del madre-solterismo habiendo tenido que afrontar las mujer desde muy temprana edad la responsabilidad de sacar adelante unos hijos y una familia, se aprecia incluso que muchas mujeres aún en edades muy avanzadas representan autoridad y cuidado hacia los hijos que aún permanecen a su lado. Muchos ancianos viven acompañados de sus conyuges, compañeros, hijos, nietos, hermanos u otros parientes, ya sea porque el factor económico no les ha permitido independizarse, ya sea por compañía y costumbre de no vivir en soledad. Resulta ademas significativo que algunos de los encuestados viven solos ya sea por que sus hijos los abandonaron en busca de un mejor futuro o porque se quedaron solos, sin descendencia o se desvincularon de sus familias de origen