En la actualidad, los profesionales de la salud tenemos posibilidades de acceder a muy buena información acerca de la efectividad de las formas de cuidado que son usadas rutinariamente en la atención del embarazo, trabajo de parto y parto, puerperio y recién nacido. Por un lado, el mayor uso de investigaciones clínicas aleatorizadas para evaluar las distintas formas de cuidado permite contar con resultados más confiables acerca del verdadero efecto de las prácticas que utilizamos. A su vez, se han desarrollado nuevas formas de revisión de esas investigaciones, que permiten evaluar el estado del conocimiento sobre una práctica en una forma; sistemática y rigurosa. Por último, el desarrollo de nuevas tecnologías de la información permite que esta información este al alcance de los trabajadores de la salud, aun en nuestros países de menores recursos.Ejemplos de estos son la Biblioteca de Salud Reproductiva producida por la Organización Mundial de la Salud (25) y la Biblioteca Cochrane (22). A través de ellas, los profesionales pueden llegar a conclusiones acerca de cuales son las prácticas Demostradas como beneficiosas, cuales no han demostrado ser de beneficio y cuales son las que a la luz de la evidencia actual pueden producir mas daño que beneficio, y fectuar las recomendaciones pertinentes a los servicios de salud y a la comunidad.El Centro Latinoamericano de Perinatología de la Organización Panamericana de la Salud, Organización Mundial de la Salud, y la red de Centros que lo componen, promueven y difunden en la región de las Américas este enfoque y el entrenamiento y ecursos necesarios para desarrollarlo. E1 aumento en el uso de las prácticas beneficiosas y la erradicación de aquellas emostradas como perjudiciales implicaría mejorar la calidad de atención a madres y niños...