Publication year: 2012
Theses and dissertations in Español presented to the Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Facultad de Medicina to obtain the academic title of Bachiller. Leader: Salaverry García, Oswaldo Eduardo
Introducción:
El SERUM es para los médicos quizás el primer momento en el cual experimentan el choque de culturas en plena relación medico paciente. Si no estamos preparados para realizar un acto médico en esas circunstancias; no estamos preparados para ser médicos en nuestro pluriétnico país. Objetivos:
Determinar el grado de competencia cultural con el que egresan los internos de medicina del Hospital Nacional Daniel Alcides Carrión, Callao 2011, mediante un estudio de conocimientos, actitudes y prácticas. Metodología:
Es un estudio cuantitativo, descriptivo y transversal de la población de internos de Medicina, del Hospital Nacional Daniel Alcides Carrión, Callao 2011. Se aplicó una encuesta a 56 de los 64 internos, para determinar los conocimientos, actitudes y prácticas en competencia cultural. Con anuencia de su autor se usó un instrumento validado y de alta confiabilidad (Alfa de Cronbach fue de 0,843 para la prueba total). Resultados:
De los 56 internos, 33 (58.9 por ciento) han nacido en las regiones de Lima y Callao; 28 (50 por ciento) son varones y 28 (50 por ciento) mujeres; 50 internos (89,3 por ciento) posee un manejo fluido de lenguas aparte del castellano; el 91 por ciento (51 internos) hablan fluidamente el inglés, y de éstos la mayoría habla o un nivel intermedio o avanzado; sólo 5 internos (8,9 por ciento) posee un nivel básico o intermedio de quechua y ninguno habla otro idioma nativo. También se encontró que existe una correlación significativa entre conocimientos y actitudes sobre competencia cultural en los internos de medicina; asimismo entre conocimientos y practicas; pero cuando analizamos la correlación entre actitudes y prácticas ésta no es significativa. Conclusión:
Los internos de medicina están mejor preparados para entablar una relación médico paciente con un extranjero norteamericano que con un compatriota huancavelicano. Lo cual nos hace ver lo incoherente de nuestra formación profesional. A pesar de que en un primer momento nos propusimos medir los niveles de competencia cultural reconocemos que la medición de dichas competencias culturales sólo se puede realizar en la práctica como toda competencia. Y lo que nosotros finalmente hemos hecho es una evaluación incompleta e indirecta de éstas. La cual nos ha dejado indicios de lo mal que estamos en estas competencias y de lo mucho que se encuentra pendiente en la formación de médicos adecuados a nuestra realidad pluriétnica